Cita en Ottawa

Sábado, 2 de junio de 2007 - en un pub escocés

A partir de mi llegada en Ottawa, encontré un lugar para estacionarme y me apresuré a comprar los diarios antes de que las tiendas cierren. Las aceras estaban abarrotadas de aficionados del hockey y la circulación era difícil. Era muy ruidoso. Claxonaban y gritaban escandiendo el nombre de su equipo favorito (los Senadores de Ottawa) que debían enfrentar a los Ducks de Anaheim la misma noche. Como era caliente y húmedo, las terrazas de los restaurantes estaban completas. Me detuve delante de un pub escocés. Por suerte, se me encuentra una mesa totalmente en la entrada. Me siento y antes de hacer mi pedido, hojeo los diarios.

De repente, levanto los ojos y me parece reconocer al pianista de Nana que pasa delante de mí. No me vio y se aleja. Pero es realmente él. Estoy cierto. En tres ocasiones, le grito LU-CIA-NO. Finalmente, se da vuelta y me reconoce enseguida. Está con su esposa, Marie-Claude, asistente de Nana. A pesar del cansancio del viaje y del jet lag, se quedaron delante de mi mesa un rato simplemente charlando. Sin embargo es extraño, ya que nos habíamos dado cita para el día siguiente después del concierto. Luciano se preguntaba realmente quién podía llamarle en Ottawa y los que le conocen le llaman Lulu. En aquel momento supe que los otros músicos estaban también en el bistro. Los veo justamente que están saliendo. Nos saludamos mutuamente. No demorro más la pareja y les aconsejo irse a descansarse para estar en forma el día siguiente.

Marie-Claude y Luciano, dos seres adorables.

Durante nuestra conversación, les expresé mi pesar por la muerte de Jean-Claude Brialy. Era el gran amigo de Nana y me imaginé que le afectará mucho. El acontecimiento ocurrió apenas algunos días antes de su salida para Canadá. Debido a su gira, no podrá asistir a sus funerales. En este caso, debe ser doblemente difícil. Es con este estado de ánimo que asistí al concierto.

 

Domingo, 3 de junio de 2007 - Centro Nacional de las Artes


LE DROIT
(2 de junio de 2007)


Boleto
(4 de junio de 2007)


OTTAWA SUN
(4 de junio de 2007)
 

La tarde comenzó con la proyección habitual sobre la retrospectiva de la carrera de Nana. Durante un largo rato, el público se maravilla delante de este trayecto extraordinario desde la época del Conservatorio hasta hoy. Luego, Luciano se sienta al piano. Inicia las primeras notas y Nana entra enseguida vestida con un caftan blanco. Se puede sentir una nervosidad totalmente normal en su voz y un poco de tristeza. Hay que decir igualmente que se trata de un concierto nostálgico, en el ámbito de su gira de adioses. Pero la animación progresiva del público le da seguridad. No sé si está previsto, pero tengo la impresión de que eligió canciones más animadas que de costumbre, griegas por la mayoría. Sonrie y sus músicos intentan hacerla reir lanzándole miradas cómplices y traviesos. Entre ellos hay un recién llegado, Christophe, el percussionnista. Los incondicionales pueden observar la diferencia de sonoridad que aporta. Y su presencia marca maravillosamente el ritmo que, con la voz de Nana, nos toma inevitablemente.

En segunda parte, Nana vuelva vestida con un conjunto rojo. Pronto es el tiempo de interpretar las grandes canciones que la señalaron. Justo antes, Nana menciona el fallecimiento de Brialy, el que le enseñó de nunca olvidar su pasado. ¡Se decidio y aguantó! Nana encadena inmediatamente y los fans están encantados de oír de nuevo "Roses Love Sunshine" y "Nickels y dimes" que fueron grandes éxitos aquí en 1979. El momento lo más fuerte, es sin dudas la secuencia de canciones de películas, cuando la música en sordina deja lugar a la voz. ¡Mouskouri a su mejor!

De izquierda a derecha: Hervé, Jean-Philippe, Nana, Yannick, Luciano y Dominic.

A lo largo de la tarde, Nana demostró profesionalismo y no dejó nada parecer de su pena. Para agradar a todos, interpretó varias canciones alternando entre los dos idiomas nacionales. Cada una hablaba de ella o acordaba maravillosos recuerdos. Gracias Nana por esta visita relámpago en nuestra tierra que nos hizo revivir de nuevo el placer de verla y de oírla.

Primera parte:

01- Intro (video)
02- I'll remember you
03- Fille du soleil
04- Tora pou pas stin xenitia
05- Love changes everything
06- Nanourisma / Quatre soleils
07- Aïde to malono
08- Siboney
09- Dix mille ans encore / Waiting
10- Yesterday's dreams
11- From both sides now
12- Odos oniron
13- L'amour en héritage / Only love
14- Le ciel est noir

 

Segunda parte:

15- Amapola
16- Je chante avec toi liberté
17- Plaisir d'amour
18- Je reviens chez nous
19- Try to remember
20- Roses Love Sunshine
21- Cucurrucucu paloma
22- Ta pedia tou Pirea
23- Roses blanches de Corfou / Weisse Rosen aus Athen / The white Rose of Athens
24- Me and Bobby McGee
25- Nickels & Dimes
26- Turn on the sun
27- Come on Blue
28- I endekati entoli
29- Milisse mou
30- L'enfant au tambour
31- The summer knows
32- Les feuilles mortes / Autumn leaves
33- Over the rainbow
34- Song of Joy (griego / alemán / inglés)
35- My way

 

Lunes, 4 de junio de 2007 - Centro de Congresos de Ottawa


The Kiwanis eDGE
(25 de mayo de 2007)


THE OTTAWA CITIZEN
(3 de junio de 2007)


Boleto por el almuerzo
(4 de junio de 2007)

Revista
(4 de junio de 2007)

Revista
(4 de junio de 2007)

Revista
(4 de junio de 2007)

Revista
(4 de junio de 2007)

MACLEAN'S
(junio de 2007)

Más de 200 personas participaron en este almuerzo beneficio en el Centro de Congresos de Ottawa. En cuanto Nana tomó asiento en la mesa de honor, se escuchó el himno nacional de Grecia y se entonó "O Canadá". A sus lados, había varias huéspedes de los cuales Sr. Yannis Mourikis, Embajador de Grecia en Canadá.

En su alocución que duró unos veinte minutos en inglés, Nana explicó las razones por las cuales decidió implicarse para la UNICEF. Los que nunca la han visto actuar como embajadora descubrieron a una excelente oradora que sabe expresarse espontáneamente y sin papel. Nana recordó la falta de infraestructuras en ciertos países. Pero afirma que hay esperanza. Con la UNICEF, hay progreso.

Nana destacó, no sin cierto orgullo, la presencia de los que viajaron para verla. Barriendo con su mirada nuestra mesa, citó Holanda (Jolanda), Nueva Zelanda (Kathy) y Quebec (yo). Era inesperado y conmovedor. Agradeciendo todos los que participaron en este acontecimiento, Nana declaró: «Ustedes hacen la diferencia en la vida de mucha gente».